El mar se abre y la distancias entre una y otra costa, se dejan sentir y percibir en horizontes imaginarios, pero en dimensiones diferentes tan exactas y bien lejanas. Es inútil escapar al proceso y es inútil renunciar al Trofeo. Bendición de bendiciones, aquel camino largo y extenso que viene terminando a tomarnos por completo y despiertos.
Una verdad manifiesta y sensible imposible de eludirla crece y vive en realidad, paralela a nuestra antigua forma llamada dualidad. Un mundo paralelo. Uno en silencio y en secreto; y otro de ruido, de memorias y de egoísmo. Un mar de arena y agua salada y otro mar de luz lleno de cristales y figuras diamantinas. Como convivir en ese ajuste natural de las formas y de las energías, en un mundo a veces tan frio y de apariencias, con la magia vívida del calor y de la emoción de nuestro regreso a CASA.
Una Personalidad que se apaga. Un adiós a ese que algún día fue, para bendecir y dar bienvenida a ese Ser que eres tú, tu YO SOY. Una entrega y una despedida. Una Fiesta completa en Alegría compartida por los Cielos, a razón de sentimientos y emociones cargado de luces de colores.
Se siente la diferencia de escenario, y duele cuando uno no se encuentra sintonizado. El compromiso está resuelto y el no estar alineado cuesta y hace daño. La Misión sagrada del espíritu empuñada en la mano izquierda y la espada dorada elevada como antorcha de luz que abre paso. Así se sube, así se anda y así se avanza en esta Nueva Tierra de Guerreros descalzos pero de corazones apasionados.
Una idea, una experiencia y al otro lado una Vida verdadera disuelta en eternidad, que te lleva y que te abriga. Una página concreta escrita a puño y letra y al reverso una historia completa hecha verso. Una prisionera y testaruda; y otra tan libre y creativa, que cuando me elevo con mis Alas doradas, vuelo tan lejos y tan cerca, que vivo y renazco al mismo tiempo en la Libertad infinita de mi Ser Supremo.
Como preferir una u otra, si no hay decisión que valga en esta pregunta. La respuesta es solo una, y no hay razón que la sostenga, pero si un Amor nostálgico a Uno Mismo y una Finalidad Única.
La vida se desarrolla desordenada en apariencia como ella sola, pero el alma evoluciona y el espíritu asciende. Una ventana y una puerta que se abre por la cual ASOMAMOS Y RECORDAMOS. Lo cierto es que de allá Somos y allá vamos. No hace falta una integración entre las dos realidades, solo hace falta una decisión interna que nos lleve de la Dualidad imaginaria, a la Sagrada Unidad del que todo lo ES.
Nuestra Merkaba esta lista y presurosa a llevar en llamas, la esencia de Nuestro Fuego y de Nuestro Ser en aquel Histórico Regreso.
Allá Vamos!
Alquino. 12 de febrero de 2011
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